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Una breve historia de AMOR

 Una breve historia de AMOR....... Dedicada a mis hijos, nietos y bisnietos y porque no a mis tataranietos Quizas el título suene un poquiti...

domingo, 28 de junio de 2020

La Confederación Espírita Argentina
https://www.ceanet.com.ar/historia-de-la-cea/
En 1880, don Antonio Ugarte, hombre probo e íntegro, fundó en la ciudad de Buenos Aires, junto con su esposa, doña Rosa Basset (excelente médium), una sociedad espírita a la cual denominó entonces Congregación Doctrinal La Fraternidad (…).
Ugarte tenía una idea fija, la de nuclear a las instituciones espíritas en una organización central de fuerza cohesiva. Trabajó febrilmente para contagiar su entusiasmo y su idea, tratando de encontrar colaboradores entre sus pares y amigos. En una compleja serie de reuniones se fueron barajando conceptos y proyectos que, poco a poco, por una razón u otra se frustraron, quedando sin efecto momentáneamente (…).
Ugarte insiste, no descansa en su acción. Piensa, y con suma razón, que el ideal espírita es sublime, y que no puede ser malogrado como se hace desde distintos ángulos. Los pequeños núcleos denominados espiritistas proliferan. Los curanderos que se asignan a sí mismos dicho título son vuelta a vuelta un tema de las crónicas policiales. Estafan la credulidad pública y se proclaman, con desparpajo, espiritistas. Ciertas adivinas, que pregonan una sarta inicua de supercherías, se anunciaban con volantes profusamente distribuidos por toda la ciudad: “espiritistas diplomadas en París”. Era ineludiblemente necesario hacer algo para que los sanos esfuerzos de los idealistas desinteresados y nobles no entraran en la bancarrota (…).
Cosme Marino
Cosme Mariño
En vista de estas evidentes falencias, registradas en el movimiento espírita argentino, la Sociedad “Constancia”, bajo la presidencia de Cosme Mariño y la ayuda valiosa de Ovidio Rebaudi, había formado una comisión especial que tenía a su cargo atender las inquietudes de las entidades en proceso de formación, a las que se proveía de elementos de estudio: libros, folletos y revistas con artículos explicativos que en un modo muy sui géneris iba cumpliendo una buena faz de la acción centralizadora (…).
Llegado diciembre de 1890, luego de una serie de cabildeos que comenzaron en 1889, Ugarte lanza el proyecto de fundación de una Federación, para aglutinar sociedades bien constituidas y ponerse todas de acuerdo en la defensa de los valores prístinos del ideal espírita. A tal propósito, ya se había ensayado formar lo que se denominó “Centro de Propaganda”, en donde se reunía a los delegados de diversos centros con el fin de cambiar ideas sobre puntos básicos doctrinales, modo de interpretación y formas de preparar campañas de propaganda. Uno de estos fallidos centros lo presidió Manuel Sáenz Cortés, y otro, Ovidio Rebaudi, y tuvieron por punto de reunión la casa de la calle Andes (hoy José E. Uriburu) nº 444. Estos propósitos fracasaron, unos tras otros, pues los actores no estaban preparados para una acción conjunta de tal naturaleza.
Ovidio Rebaudi
En 1891, en su intento por dar curso a su idea, pese a las oposiciones, resuelve Ugarte volcar todas las posibilidades efectivas de la sociedad “La Fraternidad”, con todos sus recursos, en el mecanismo federativo que logró poner en funciones. La Federación Espírita Argentina tuvo vida, pues. Hasta la revista de la institución pasó a ser íntegramente el órgano de la federación. Al cumplir “La Fraternidad” su 11º aniversario, no puede hacer la fiesta grande que en estos casos y hasta entonces se acostumbraba realizar, por estar contribuyendo con todas sus fuerzas y bagajes a la tal organización federativa. Este organismo logra reunirse por un tiempo, tres veces por mes, los días 9, 19 y 29, en Brandsen 1565. Allí ha establecido su sede. Es el domicilio de Manuel Sáenz Cortés.
A fines de 1899, Ugarte vuelve a la carga con su idea de una federación, y se logra integrar una comisión con Ovidio Rebaudi, Modesto Rodríguez Freire, Juan Canter, Cosme Mariño y él. Las reuniones se realizan en la sede de “La Fraternidad”. Se logra por fin reunir a los delegados de 11 sociedades, que empiezan a responder a la idea central, y el 14 de junio de 1900 queda constituida la Confederación Espiritista Argentina, ya con 16 representaciones de Capital e Interior. Resulta electo presidente don Cosme Mariño, y se pone en marcha el primer intento serio de organización federativa. No cabe aquí señalar todos los problemas que este logro llevó implícitos. La fortaleza moral, la dedicación y constancia de Ugarte tuvieron por fin su concretización.
Placa de Fundación de la Confederación Espiritista Argentina
Placa de fundación de la Confederación Espiritista Argentina

Primera Mesa Directiva de la CEA:

Presidente: Cosme Mariño.
Vicepresidente Primero: Antonio Ugarte.
Vicepresidente Segundo: Luis González.
Secretario General: Ignacio Ferraro.
Prosecretario Primero: Emilio Becher.
Prosecretario Segundo: Pedro Serié.
Prosecretario Tercero: Antonio Turco.
Prosecretario Cuarto: Martín Castiarena.
Tesorero: Isidro Fernández.
Protesorero: Vicente Fischetti.

(*) César Bogo: Periodista, escritor y dirigente espírita argentino; Presidente de la CEA (1955-1959). Párrafos extraídos de sus libros Una larga trayectoria institucional: Historia de la CEA, CEA, Buenos Aires, 1984; y Perfil de un arquetipo: Antonio Ugarte, CEA, Buenos Aires, 1970.

lunes, 15 de junio de 2020